Wikia El Nuevo Orden
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Turning Point - Resistencia

El pueblo americano inició una feroz lucha contra los nazis, pero esta se esfumó por las políticas amigables de ocupación alemanas.

La Resistencia conforma todas aquellas facciones que se oponen, primero, a las Potencias del Eje, en la Segunda Guerra Mundial, y, segundo, al Nuevo Orden, desde la inmediata posguerra.

Chilena[]

Tras instaurarse un semi-gobierno títere en la República de Chile, después de su derrota en la masiva invasión que Argentina realizó, una gran resistencia se organizó contra el ocupante y el colaboracionista. La Resistencia chilena tenía sus cuarteles generales ubicados preferente y especialmente en las duras montañas andinas. Desde de la cordillera dirigían sus ataques.

Muchos militares chilenos de tendencia socialista formaron parte de ella, y Marmaduke Grove fue su principal referente.

Brasileña[]

Pueblos amazónicos[]

Shuar[]

Comillas de Cita inicio Derrotaron al Imperio Inca, derrotaron al imperio español ¡y derrotarán al malvado y fascista imperio argentino también! Comillas de Cita final

—Propaganda aliada sobre los shuar y su guerra de guerrillas.


Quizás la resistencia más feroz y pesadillesca encontrada por los argentinos durante toda la Gran Guerra Americana fue en el pueblo shuar, despectivamente llamados jíbaros, de las selvas de Perú y Ecuador. Los shuar, comprometidos con la causa aliada, desplegaron una brutal guerra psicológica contra los invasores, en lo que se llamó cacería de cabezas. Este tipo de guerra se transformó en todo un deporte y fue la pesadilla de los desafortunados soldados argentinos que caían en las trampas de la selva. A las cabezas se les practicaba la famosa tzantza, la reducción de cabezas, y luego eran diseminadas por la selva para aterrorizar a los soldados y desmoralizarlos.

No obstante, este tipo de guerra llevó a que los soldados amazónicos argentinos, muchos comandos entre ellos, cometieran brutalidades como represalias contra los shuar, en venganza por sus compañeros caídos y su destino horroroso. El miedo, el odio y la sed de venganza llevaron a que desobedecieran sistemáticamente las órdenes del presidente Perón y del general Juan Pistarini de la política de libertadores (completamente diferente a las actitudes despiadadas japonesa y alemana, alentadas por sus propios gobiernos) y desataran una contrainsurgencia desmedida. Cuando sometían una aldea, los soldados o comandos usaban sus lanzallamas para incendiarlas con sus habitantes en sus chozas dentro. Las torturas fueron comunes. Entre los mismos soldados argentinos hubo competencias y apuestas por sobre quién mataba y decapitaba más shuar: hacían su propio juego de cacería de cabezas. Se siguió la norma japonesa de los Tres todos en los países que ocupaban: Quemalo todo, matalo todo y destrozalo todo.

Con la victoria en la guerra, los altos oficiales argentinos simplemente decidieron hacer como si nada hubiese ocurrido, olvidaron todos aquellos crímenes y se dedicaron a ayudar al pueblo shuar, duramente castigado. Los soldados implicados en las masacres shuar no fueron juzgados.

Rusa[]

Represión alemana en Moscú
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